lunes, 28 de julio de 2008

BIOFLOW: HASTA EL CACTUS MAS ESPINOSO TIENE FLOR

Este verano, en una de esas noches agradables y relajadas, estábamos cenando con unos amigos. Uno de ellos se dedica a temas de psicología clínica, aunque en general no son casos de neuropatías graves sino sobretodo temas de ansiedades causadas por temas más bien sociales.
En un momento de la conversación, comentó:

- ...Muchas veces me encuentro con personas a las que es imposible de poder animar. No soy capaz de encontrar el resorte o la rendija por la que poder acceder a su interior y poder construir. He llegado a la conclusión que hay personas imposibles de poder sacarles ni una mínima sonrisa. Hay que admitirlo de que hay personas negativas y frente a eso lo que has de hacer es procurar que no te contaminen.
- ¿Quieres decir que no hay alguna solución?- Le pregunté.
- Ni una- responsdió contundente.
- Pues mira que me parece que aún no has agotado todo lo posible...- le insinué.
- ¿Ya me dirás?
- Para empezar...No soy psicólogo. Pero mi día a día profesional desde hace muchos años es gestionar personas. Y te puedo decir que de todo tipo y con todos las personalidades y estados anímicos imaginables. Algunos con vidas estable, otros con situaciones de separaciones otros con desgracias personales, otros con enfermedades dentro de los miembros de su familia, otros con dificultades económicas,....De todo ,de verdad, de todo.
- No lo había visto desde ese punto de vista.
- Mi labor es llevarlos a la máxima motivación posible. Lo intenté desde hace tiempo corriguiendo aquellos aspectos de mejora. Mejorando las debiliades. Pero fracasé de forma estrepitosa. Había personas haciendo esfuerzos gigantescos para mejorar, pero cuando estos se encontraban en periodos de alta exigencia, todo lo mejorado se venía abajo. Después de reflexionar mucho, me dí cuenta de que lo que tenóa que ahcer es mirar a las personas desde su lado positivo. Mirar lo que no saben hacer es mirar la vida y las personas desde la negatividad. Entonces empecé a cambiar la visión de las personas y ha estudiar aquellas habilidades de personalidades en las que mejor descataban y trabajar la relación laboral con estas como centro.
-¿y?
- Pues como magia...Hasta el más negativo sonreía. Yo te recomiendo, desde mi humildad que encuentres en las personas aquellas habilidades innatas que hacen mejor que nadie.
- Sabes que es una visión muy positiva de la vida....Lo tendré en cuenta.

Aquel día me sirvió para ver que las reflexiones personales de hacer girar el mundo con el centro en las fortalezas de cada una de las personas era una fuerza motriz vital. Pero fue la Señora Naturaleza la que grabó eternamente la conversación de la noche de verano...

"Tenemos un cactus en nuestra casa de la Costa Brava. Ha resistido tramuntanas, frío, sequía y miles de condiciones adversas...Y allí feucho y descolorido se encuentra, mostrando unas largas y agresivas espinas que te hacen mantener una distancia prudencial. Más de uno se ha pinchado con las espinas y féliz precisamente no ha quedado!.

Un día, le apareció una flor : preciosa y maravillosa!!!. A pesar de que los pulgones impedían que la flor llegará a brillar, no pudieron, aquel cactus espinoso y negativo mostró una imagen bonita y alegre. La naturaleza volvía ha mostrar su sabiduría: Hasta el ser más antisocial tiene una maravillosa flor dentro suyo a pesar de que los pulgones intenten hacer todo lo posible para que no se vea".

lunes, 21 de julio de 2008

BIOFLOW: TU MARCA PERSONAL

En la empresa, efectuamos una serie de reuniones trimestrales que tienen el objeto de informarse entre departamento de como va el año y los principales problemas que han sido gestionados por el equipo.

En una de estas presentaciones, el departamento de Recursos Humanos efectuó una revelación sorprendente y cargada de sentido común.

"Queremos personas que tenga marca propia!!" lanzaron a la audiencia el mensaje, que en un principio tenía tintes de provocación y de poco realismo. Pero continuaron en su argumentación...

"Queremos personas que se recuerden, queremos personas con marca propia."

"Las personas genéricas sin marca, pasan desapercibidas. No aportan nada especial, no ahcen cosas diferentes ni sorprendentes..."

"Queremos personas con una marca clara, con sus atributos claramente significados y sobretodo que se tengan claro que su marca tiene unas característcias especiales para hacer unos trabajos adecuados"

"Queremos marcas personales que no dejen indiferente a aquel que trabaje con ellos"
.....

Y estuvieron reflexionando sobre la importante de ver a las personas por su lado de lo que las hace únicas y especiales.

A mí si que me hicieron reflexionar y mucho con su afirmación o provocación. He llegado a la conclusión de que estaban en lo cierto. La grandeza de los grandes profesionales es que es fácil decir como es y que características tiene. Al final la idea que uno se hace de un profesional no deja de ser la marca personal de esta persona.

Cada persona debería de concerse a sí misma y trabajar desde el aspecto más congénito/innato/ genotípico....
Solamente si eres capaz de definir tus atributos como marca personal es cuando podrás dejar sello de tu paso por cualquier sitio, proyecto o equipo.
Hay que definir y acuñar tu marca!!....Yo creo que mi marca: José Escaich® la tengo clara. Y la intento desarrollar dentro de sus fortalezas y atributos.

lunes, 14 de julio de 2008

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QUIERO SENTIR EL AROMA DEL CAFE POR ULTIMA VEZ


Hoy es mi último día en esta vida y quiero sentir el aroma del café

Una vez viviendo una antigua serie de televisión: Alli Mc Beal, me percaté de esto. Estaba esta persona comprando un café con una compañera de oficina: La compañera ansiosamente puso su vaso en sus labios y literalmente engulló medio vaso de café.

  •           Que has hecho!!! Es un sacrilegio!!- le gritó Alli Mc Beal a su colega.
  •           Pues beberme el café.
  •           Pues te has perdido el momento más mágico de tomarte el café.
  •           Asi? Cual es?
  •           Pues cuando antes de beberlo. Aguantando las ganas de beber y dejar que el cálido aroma de café recién hecho entre por tus fosas nasales. Inspiras con profundidad pero sin fuerza y deja que el aroma llegue a tu cerebro. Nota el agradable aroma entrar en todo tu cuerpo. Luego le das un sorbo pequeño…
  •           Vaya!!

La mañana siguiente lo hice. Y noté como una cosa que habitualmente hacía de forma mecánica en unos segundos, solamente invirtiendo apenas 10 o 15 segundos complementarios cambiaba de forma total. Pensé con detalle sobre ese fenómeno. Lo que realmente había hecho no era disfrutar mejor del café…Lo que había hecho es disfrutar del presente y de los pequeños detalles que tienes delante de ti y que solamente los ves si vives disfrutando el presente, y que ni los aprecias si vives volcado en los proyectos futuros.

Vivir en el pensamiento de que hoy es el último día puede parecer una visión pesimista, pero es todo lo contrario, es una visión realista y serena  de lo que es la existencia. Es una manera de verlo todo desde el presente, desde una situación de realidad terrenal y desde la más amplia espiritualidad posible.

Una vez leí de que el pasado es eso un recuerdo del ayer que ya no existe, y el futuro no existe por que aún no ha llegado. Por lo que solamente tenemos el presente, que es un cruce entre las consecuencias de nuestras acciones y decisiones de ayer y una toma de decisiones cuyas consecuencias o beneficios los lograremos en el futuro.

Vivir desde la creencia que hoy es el último día de tu vida terrenal te da profundidad en valorizar hasta el más pequeño detalle, en borrar de tu escala de importancia aquellas cosas superfluas y materialistas y centrarte en lo que es esencial en tu espíritu. Te da conexión con la parte más íntima de tu ser. Te impulsa en decir y actuar en aquellas cosas que por vergüenza o por inercia de la rutina dejas siempre para después, para mañana…E igual mañana no existe.

Durante mi evolución como persona y mi itinerario vital he ido viviendo diferentes situaciones que te hacen bajar de las nubes y situarte en la realidad de lo que es la vida terrenal, un viaje con un principio y tiene un fin.

En ocasiones vivimos obsesionados por las cosas que pensamos hacer en el momento siguiente al de ahora, olvidándonos de aquellas pequeñas cosas o detalles que forman la esencia del día a día y que son las que realmente hacen mover el mundo.

Son ya más de 7 años de la experiencia del aroma del café y continúo oliendo el aroma del café de cada mañana. Es una experiencia que me devuelve de forma directa a la esencia de existir.

Párate y vive el presente que será el primer paso a disfrutar de forma plena y auténtica de tu más  auténtica vida.